Tiene sólo una cuadra de recorrido. Nace en la Avenida Boedo y desemboca en Colombres. Es una cortada típicamente barrial, situada en el corazón del barrio de Boedo. Cuando los Carnavales porteños estaban en su apogeo, el pasaje era la tribuna oficial de esos días. Las crónicas de la época cuentan de los corsos, los bailes, la música y la alegría que
llenaban los rincones de la cortada en los que, según los historiadores, se celebraba uno de los mejores Carnavales porteños. La historia del pasaje se remite al siglo XIX, cuando el rico comerciante Camio adquiere esas tierras para luego, en 1904, cederlas a la Municipalidad. El nombre es un homenaje a San Ignacio de Antioquía, teólogo y mártir de la Iglesia primitiva. El pasaje es escenario del mítico Café Margot, Sitio de Interés Cultural y uno de los Bares Notables de nuestra ciudad. Y punto de reunión de grupos de poesía, escritura, música y pintura.

Nota: la imagen corresponde a Mercado de Pulgas