Se dice de ella que es una de las calles más famosas de Argentina. Fue bautizada antiguamente como San José, pero en 1821 cambia su nombre por La Florida, en recuerdo del triunfo de las tropas criollas en el Alta Perú en la batalla homónima. Florida, como se la conoce desde hace años, fue testigo de episodios históricos y también de paseos de los porteños durante varias
generaciones. Prueba de esto es que fue una de las primeras calles empedradas de la ciudad, y una de las primeras que recibieron el alumbrado a gas y luego, el alumbrado eléctrico. Y, dato curioso, también fue alfombrada. En 1970, la empresa Meller, en un novedoso golpe publicitario, la cubrió con uno de sus productos durante 40 días. La calle Florida albergó casas históricas como la de Mariquita Sánchez de Thompson, donde se interpretó el Himno por vez primera. Domingo Matheu, Cosme Argerich, Carlos Pellegrini y Bernardo de Irigoyen, tuvieron también sus casas en Florida. Lugar de exclusivos comercios y galerías, de confiterías ,que fueron puntos de reunión de intelectuales y políticos de la época, también fue sede de grandes tiendas como Harrods y Gath &Chaves. El 1º de julio de 1971 Florida se convierte en la primera calle peatonal del país. Sus cúpulas, sus monumentos, sus emblemáticos edificios y mansiones, también contribuyeron para hacer de Florida, una calle distinta. En 1956, una crónica periodística decía sobre ella “…De perfil personalísimo, ha sido y es la sala de recibo de Buenos Aires…no es una calle más… es el primer paseo del turista y su mejor recuerdo”

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