“Martín Fierro”; bronce, 53 x 29 x 16 cm., 1961. Inventario Patrimonial Nº 8566 Fundición Vignola, Firenze (Italia).

Nació el 5 de septiembre de 1891 en la Legación del Uruguay en Madrid (España).

Escultor uruguayo. Su padre, el doctor don Juan Zorrilla de San Martín, desempeñó el cargo de Ministro plenipotenciario de la República Uruguaya. Escultor universal de formación humanística, supo conciliar lo contemporáneo con lo clásico. Concurrió al taller del escultor Felipe Menini en Montevideo. En 1914 obtuvo una beca oficial y volvió a Europa; se radicó en Florencia y estudió a los maestros de la antigüedad y del Renacimiento, así como las escuelas modernas. Por la guerra europea volvió a su país. En 1922 regresó a Europa y se instaló en París, estudió y frecuentó la intimidad del taller de Bourdelle. En 1925 concurrió al Salón de Otoño; le fue acordado el título de “societaire” con motivo de la presentación de la Fuente de los Atletas.

En el Salón de los Artistas Franceses de 1927 se presentó con el Monumento al gaucho, por el cual se le otorgó la Medalla de Plata, máxima distinción que se otorga a los extranjeros. En 1926 y 1927 concurrió, también por invitación especial, al Salón de la Tullerías. En 1936 la Comisión Nacional de Bellas Artes de Buenos Aires organizó una exposición retrospectiva de su obra. En el año 1937 la Comisión de Cooperación intelectual de París lo invitó a concurrir a la Exposición de esa ciudad y ser huésped de honor y conferencista del Congreso de Arte.

Su obra escultórica comprende numerosos monumentos públicos: el Monumento al Gaucho (en Montevideo, Uruguay), el Obelisco a los constituyentes de 1830 (en Montevideo, 1930), el Monumento al General Roca (ganado en concurso internacional, C.A.B.A., 1941), San José (erigido en la Iglesia de la Tombe Isoire, París), el Monumento a Aparicio Saravia (Montevideo, 1956), el bronce El viejo Vizcacha (emplazado en un jardín de la ciudad), la Fuente de los Atletas (erigida en el Parque Rodó).

Sus monumentos, obra escultórica y obra pictórica privadas son numerosísimos. Fue autor de la decoración mural de la Capilla del Buen Pastor y de catorce grandes cuadros murales de la Iglesia del Cordón. Fue director del Museo Nacional de Bellas Artes y miembro de la Comisión Nacional de Bellas Artes y Miembro de Honor del Instituto de Artes y Letras de Nueva York. Entre sus últimos trabajos figuran el monumento a su padre, erigido en Montevideo, y el monumento a Artigas, en Buenos Aires, obra encomendada por el gobierno argentino.