El primer cartero de la ciudad

 

En 1771 las autoridades porteñas consideraron que era el momento que
Buenos Aires cuente con un cartero. Contratan entonces al sevillano
Bruno Ramírez quien, según el recorrido, hacía las entregas a pie o a
caballo. No cobraba sueldo, pero recibía medio real por cada carta
entregada. Ramírez permaneció en su puesto durante más de un año,
hasta que decide volver a España. Pedro Veiras fue su reemplazo, y tuvo
mejor suerte. A él sí, las autoridades porteñas le asignan un salario fijo.
Muchos años después, en homenaje a Bruno Ramírez, esta fecha queda
formalmente instituida como el Día del Cartero
Nota: la imagen es de Bruno Ramírez y corresponde al sitio Primera
Edición