Se inaugura el Edificio Kavanagh

 

La construcción de este edificio icónico de nuestra ciudad se inicia en abril de 1934. Promovida por Corina Kavanagh, los arquitectos fueron Sánchez, Lagos y De la Torre, junto al ingeniero Rodolfo Cervini. La obra de 120 metros de altura sería, en su momento, el edificio más alto de Latinoamérica. Su volumetría escalonada tipo Art-Decó, similar a la proa de un barco, lo convirtió en un edificio atípico en la época. La obra demoró sólo 14 meses en ser terminada. Al año de ser inaugurado recibió distinciones como el Premio Municipal de Casa Colectiva y de Fachada y el del American Institute of Architects. Por sus características técnicas, comparte un galardón de la Sociedad de Ingenieros  de los Estados Unidos junto a la Torre Eiffel, la Represa de Assuan y el Canal de Panamá. El edificio cuenta con una superficie de 28000 metros cuadrados de superficie en sus 31 pisos, 5 escaleras, 12 ascensores, 103 departamentos y 10 locales en la planta baja. En la época de su inauguración contaba con comodidades de avanzada para esos años: equipo de aire centralizado, pileta y sistema telefónico central. Curiosamente no cuenta con cocheras ni portero eléctrico, los visitantes deben anunciarse en recepción. Su ubicación, frente a la hermosa Plaza San Martín, es parte de una leyenda urbana. Corina era una mujer acaudalada, pero no patricia. Una de sus hijas  ve trunco su romance con un joven Anchorena, por pedido de la madre de él. Por aquellos años los Anchorena vivían en el Palacio San Martín, (actual Cancillería), desde allí se divisaba la Basílica del Santísimo Sacramento, sepulcro de la familia. Según la leyenda, en venganza, Corina manda construir el Kavanagh estratégicamente para obstruir la vista entre los Anchorena y la Basílica. Si bien la leyenda es desmentida por varios historiadores, Corina cumplió su objetivo. El único lugar desde donde se puede divisar la fachada de la Basílica es justamente desde el pasaje  que lleva su nombre y forma parte del mismo edificio. Más allá de la leyenda, el Kavanagh , uno de los emblemas arquitectónicos de nuestra ciudad, fue distinguido en 1994 por la Asociación Estadounidense de Ingeniería Civil, como “hito histórico internacional” de la ingeniería civil.

Nota: la imagen pertenece al sitio Moderna Buenos Aires