Día de Villa Soldati

 


En un sistema muy usado en la época, donde los altos funcionarios de
turno pagaban favores con la donación de tierras deshabitadas, el
gobernador Juan Manuel de Rosas concede a un caudillo federal de
apellido Lucero, las tierras que darían origen al barrio. El lugar comprendía
las actuales Av. Roca, Lafuente, Escalada y el Riachuelo. El lugar se hizo
conocido como la “Quinta del Molino”, por la instalación de un molino
hidráulico. A la muerte de Lucero la quinta se pobló de intrusos que, sin
documentación alguna, usurparon las tierras durante muchísimos años. En
1905 un visionario comerciante suizo, José Ferdinando Francisco Soldati,
se involucra en una gran operación inmobiliaria al tener conocimiento de
la inauguración del trazado de una línea férrea que llegaría a la zona. El 29
de noviembre de 1908 Soldati funda el barrio. Compra también hectáreas
de tierras vecinas, donde luego se fundaría Villa Lugano, en honor a la
localidad suiza de donde es oriundo Soldati. Las tierras adquiridas por el
comerciante eran bajas e inundables por las constantes crecidas del
Riachuelo. Villa Soldati fue creciendo gracias al impulso
fundamentalmente de los inmigrantes que, por ese entonces, llegaban al
país desde diversos lugares del mundo. Esos primeros pobladores
levantaron sus casas con gran esfuerzo, teniendo en cuenta lo inundable
de las tierras. Lentamente el lugar fue creciendo gracias al impulso del
actual Ferrocarril Belgrano Sur. Pero, pese a la llegada del ferrocarril,
lamentablemente la zona fue muy castigada por las continuas
inundaciones y la tardanza de servicios esenciales como la electricidad.
Asentamientos marginales y grandes basurales a cielo abierto fueron otros
de los factores que frenaron el incipiente desarrollo de años anteriores.
Tuvo que pasar mucho tiempo para que los gobiernos, con la aprobación
de distintas leyes, pongan orden en la urbanización. La construcción de
conjuntos habitacionales, el entubamiento del Arroyo Cildáñez, la
instalación del cinturón ecológico conocido como C.E.A.N.S.E. y de
distintos espacios verdes, le dieron nuevos impulsos al barrio. Un barrio
que nació gracias a la impronta visionaria de un inmigrante suizo que llegó
a nuestra tierra apostando por tierras donde nadie antes se animaba.
Nota: la imagen pertenece al sitio Buenos Aires Ciudad