Desde 1970, y por iniciativa del senador estadounidense Gaylord Nelson, se celebra en todo el mundo el Día de la Madre Tierra. El objetivo es concientizar a la humanidad de los problemas de la contaminación ambiental, la destrucción del medio ambiente, la preservación de la flora y fauna del mundo y el cuidado sobre la casa que habitamos y nos cobija a todos los seres vivos: la Tierra. Su destrucción es, inevitablemente, la destrucción de todo lo viviente. Humanos, animales, árboles y plantas, todos juntos formamos parte de un mismo sistema que vive o se destruye a la vez. Y es el hombre, con su capacidad de raciocinio, el que tiene el deber de proteger el medio ambiente. "Produce una inmensa tristeza pensar que la naturaleza habla mientras el género humano no la escucha" (Víctor Hugo).