“Desembarco en Buenos Aires”; dibujo a lápiz, 23 x 30 cm., 1845. Inventario Patrimonial Nº 7756

Nació en Augsburgo (Alemania) el 21 de marzo de 1802 y murió en Weilheim el 29 de mayo de 1858.

Pintor, grabador y litógrafo, es uno de los artistas europeos que visitaron América Latina en el siglo XIX y del género costumbrista de entonces. Entre los años 1821 y 1847, deslumbrado por el paisaje de este continente y sus costumbres, las que plasmó en cuadros y dibujos. Trabajó activamente en Buenos Aires, en Río de Janeiro, Santiago de Chile, Lima, Montevideo, las costas de Venezuela y México. Nacido en el seno de una familia de artistas. En 1817 comenzó sus estudios en la Academia de Pintura en la ciudad de Munich.. En 1821, partió hacia en Brasil como artista para registrar una expedición. Poco después de iniciarse la expedición al interior, por no haber recibido el pago por sus honorarios, renunció. Se dedicó entonces a recorrer las provincias de Minas Gerais, Matto Grosso, Espíritu Santo y Bahía. Se internó en la selva; allí encontró al aborigen y dibujó cuanto veía: paisajes, plantas, hombres, animales, costumbres e incluso anotaba palabras de las lenguas indígenas. Llegó a registrar más de quinientas hojas con estas ilustraciones. En 1826 regresó a París. Allí conoció a Gros, Vernet, Delacroix, David y Scheffer. Después de visitar Venecia regresó a Alemania y elaboró el proyecto de recorrer toda América comenzando por las Antillas y México. Fue detenido y preso dos meses por ayudar a un amigo. Fue deportado a Chile, en donde permaneció once años, tiempo que utilizó para dibujar, pintar y documentar su recorrido por ese país. Se hizo amigo de un cacique quien lo llevó hasta el corazón mismo de la Araucanía, donde nadie llegaba en aquellos tiempos. En 1837-38 conoció la cordillera andina y Mendoza; así incursionó en las pampas argentinas y concibió lo que llamó mundo  araucano, con raptos de mujeres, luchas, fugas, registrado en veinticinco óleos. Cerca de 1843 realizó durante seis meses un extenso viaje que lo llevó al sur del Perú; de paso por Arequipa y Cuzco, hizo visitas a La Paz y al Lago Titicaca. En el museo Graphische Sammlung de Munich se conservan alrededor de setecientos trabajos suyos que constituyen testimonios invalorables. Rugendas captó tapadas limeñas, escenas callejeras, indios del mercado, paisajes arequipeños y cuzqueños, retratos de gobernantes, así como de personajes notables. Pintó cuarenta y cuatro retratos de los virreyes del Perú. Dibujó lugares australes fueguinos y patagones, hizo escala en las islas Malvinas, prosiguió el viaje por Maldonado y Montevideo, para llegar finalmente a Buenos Aires. Estuvo poco tiempo en la ciudad, pero lo suficiente para retratar a varias personalidades, entre ellas a María Sánchez de Mandeville. Conoció al joven Emperador Pedro II, quien adquirió varios de sus trabajos. En marzo de 1847 desembarcó en Falmouth (Gran Bretaña) y rápidamente se dirigió a París. En Baviera, fue pintor de la corte de los reyes Luis I y Maximiliano II. Se instaló en Munich y vendió 3062 trabajos, actualmente se conservan en la Staatliche Graphische Sammlung de esa ciudad. Se retiró a Augsburgo, en donde residía su familia, ya estaba gravemente enfermo. Fue sepultado en Weilheim, donde su sepultura ha desaparecido. Sus obras se encuentran dispersas por todo el mundo.